Sobre la Vida...

 

"- Mira, estas dos estaciones que he pasado aquí me han dado una felicidad que 

no creo que merezca. Pero entiende que soy hija de la Guerra...

amar y ser amada, no sé si soy capaz de eso"

Kora de Rebel Moon

El año se acaba, y en estas fechas donde parecen reinar las buenas voluntades, los buenos deseos, una pregunta me reconcome en el interior. ¿Qué puedes decirle a alguien cuyo Mundo, cuya Vida está siendo asediada? Por las adversidades, por la mala fortuna, por lo que parece una venganza de los antiguos Dioses. ¿Qué puedes decir que no suene a tópico, típico, repetitivo, vacío, más una coletilla que realmente algo con sentido?¿Qué?¿Qué? 

Desde mi incapacidad emocional, desde mi tullidez emocional, no encuentro ninguna palabra de aliento que realmente sienta como la correcta. Decir lo que se suele decir en determinadas ocasiones me suena tan estéril, pero qué hacer cuando la Adversidad azota a tus seres queridos y no puedes más que estar ahí, cuando el ataque es tan grande y devastador que a duras penas puedes hacer algo, algo aparte de estar ahí y aguantar como puedas.

Me gustaría tener esa respuesta mágica, esa perla de Sabiduría que te hiciera, que nos hiciera saber que todo esto tiene algún sentido, que todo esto será para bien, pero no tengo nada salvo mi propia ignorancia. ¿Qué decirte a ti para  poder aliviar tu sufrimiento? 

El Camino del Aikido fluye a través del Camino de la Vida, y la Vida tiene de todo, pasajes buenos y pasajes malos, oscuros, devastadores, capaces en  muchas ocasiones de aniquilar nuestros Sueños, nuestros planes. La Vida te acaba sometiendo con su arma más mortífera, el paso del Tiempo. Nunca sabrás cuando te asistirá un nuevo golpe, y tiene la virtud de que cuando crees que no puedes más, te presiona un poco más. El Aikido puede ayudarnos a capear estos temporales, pero no saldremos indemnes de ellos. Las heridas sobre todo en nuestro corazón, acabarán por darnos una nueva forma de ver las cosas, pero esto no nos hará infalibles ante nuevos ataques...al final hacemos lo que podemos, y a veces eso no es mucho.

Mis propios miedos, mis propias miserias carecen de sentido ahora. El Año termina y lejos de ser un happy flower observo lo que está por venir desde una actitud de estar preparado para lo peor. Las pequeñas alegrías que disfruto se convierten ahora en tesoros, y lejos de sentirme satisfecho, prosigo con mi lucha interior, pero por encima de todo sigue la pregunta...¿qué te puedo decir que suene a Verdad, que suene a Esperanza?

El Universo en su mayor parte es materia oscura, una Oscuridad bañada con el resplandor de miles y miles de estrellas, algunas de ellas ya han muerto pero su Luz sigue viajando por el Espacio llegando hasta nosotros. Muchas de esas estrellas que observamos en el Cielo son tan solo un reflejo de aquello que fueron, pero aún así siguen brillando. A veces pienso que tal vez ese sea nuestro Destino, brillar en la inmensidad de la Oscuridad todo el tiempo que podamos. Algunos brillarán más que otros, al igual que las estrellas, pero tal vez ese sea nuestro verdadero reto, nuestra verdadera lucha, brillar intentando iluminar la Oscuridad.

Feliz Año a pesar de todo. Un fuerte abrazo,

Félix